A diferencia de la mayorÃa de tenismesistas mis primeros raquetazos no fueron con un entrenador de un club o algún jugador experto. Quiero dedicar el primero de mis blogs a la persona que me introdujo al mundo del deporte pero en especial a esta hermosa disciplina.
Profesor Everardo RodrÃguez
Nos remontamos al año 1991, a un pequeño municipio del departamento de Cundinamarca en Colombia llamado Carmen de Carupa, mi pueblo. Lugar: Escuela Antonio Nariño, (ahora llamada Institución Educativa Departamental Carmen de Carupa, sede Antonio Nariño) 4to. grado de básica primaria, es aquà en donde el Licenciado en Educación FÃsica Everardo RodrÃguez aparece en mi vida.
Recuerdo que a su cargo estaban las dos escuelas del municipio: la escuela Antonia Santos y la escuela Antonio Nariño, la rivalidad era la normal para este tipo de situaciones entre las dos escuelas. Con su liderazgo el profesor RodrÃguez nos dio a conocer a los dos grupos diferentes disciplinas: baloncesto, voleibol, atletismo y tenis de mesa, en donde con pasión, amor y disciplina nos entrenaba en las prácticas regulares de educación fÃsica, complementando con jornadas extras en las tardes para conformar los equipos que participarÃan en los juegos municipales escolares de la región, mostrándonos de esta manera las diferentes rutas que el deporte proporciona para realizar un proyecto de vida. Éramos niños felices aprendiendo con diversión y amor diferentes habilidades, todos tenÃamos distintos talentos y con ansiedad querÃamos que la clase de educación fÃsica llegara pronto.
El profe Everardo junto con mis padres hacÃan un excelente equipo de trabajo, ellos a temprana edad inyectaron en mà la pasión por lograr las metas que proyectábamos y me motivaron a soñar generando en mà el espÃritu deportivo. En muchas ocasiones nos sentábamos los cuatro a hablar sobre los objetivos a corto, mediano y largo plazo, principalmente con el baloncesto que fue mi primer deporte. Poco a poco y siempre acompañada por mi profesor, logré un cupo en la selección del municipio y participamos primero en el regional, luego departamental, hasta llegar a los Juegos Intercolegiados Nacionales en donde quedamos campeones (Duitama 1992) TenÃa muchas habilidades en esa disciplina, gozaba jugar, era capitana del equipo y luchaba por tener la camisa número 10 en todos mis uniformes, pero mis padres decidieron hablar con él profesor por el "gusto que yo sentÃa" para practicar tenis de mesa. Lo pongo entre comillas porque creo que el gusto era más de ellos que mÃo en ese momento.
Por supuesto en esa época no habÃan celulares o Facebook, Youtube, Google, etc., por lo tanto mi maestro se dió a la tarea de aprender lo básico empÃricamente (seguramente en su universidad tuvo contacto con esta disciplina) para transmitÃrmelo y empezar a explorar el deporte que transformó mi vida. Esto irremediablemente tenÃa que llevarme a tomar una decisión: tenis de mesa o baloncesto, ya que el profesor y mis padres siempre lo tuvieron claro: Lady va a ser una excelente deportista y queremos que lo haga profesionalmente, pero debe decidir. Porqué me quedé en tenis de mesa? Esa respuesta vendrá otro dÃa por que hoy querÃa hablarles de este gran maestro que me dedicó calidad de tiempo y me ayudó a entender la grandeza del deporte, muchas veces comportándose como mi padre. GRACIAS infinitas Licenciado Everardo Rodriguez.
Regularmente en este espacio escribiré sobre temas técnicos, tácticos, de experiencias en entrenamientos y competencias, reseñas sobre materiales deportivos, etc., además trataré de hacer un pequeño homenaje a tantas personas que han contribuido en mi exitosa carrera. Espero sus comentarios y sugerencias.